jueves, 20 de agosto de 2009

El cuento de la lechera


Posición conservacionista ante la llamada “ruina eólica” y la destrucción de ‘empleo’.

Este verano, en contra del tópico periodístico sobre la falta de noticias, ha resultado abundante en informaciones, en diversas direcciones, sobre el futuro de las montañas de la provincia de León. Gran parte de esto es debido a la importante, y no recurrible, sentencia 01448/2009 del Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León que desestimó los recursos de apelación interpuestos por Endesa Cogeneración y Renovables, S.A. y por la Junta de Castilla y León respecto a la anulación de la autorización del parque eólico “Murias II” y que ha desembocado en otras, que establecen que la Administración Regional ha otorgado autorizaciones administrativas contrarias a la Ley en materia eólica. Unas sentencias de las que deberán emanar las correspondientes responsabilidades políticas, administrativas y empresariales.
A los colectivos de índole conservacionista siempre se les acusa de decir que no, por sistema, e ir en contra del progreso. Pero lo cierto es que los únicos que desde los años 70 han hablado de energías renovables, cambio climático y desarrollo sostenible, han sido precisamente estos colectivos. Energías renovables POR SUPUESTO, pero siempre que no afecten a espacios naturales protegidos y de interés y, por supuesto, no contravengan la legalidad. Esta posición es inequívoca: el empleo y el dinero no puede estar por encima de la legalidad ni del porvenir de nuestros pueblos.
Ahora que la Justicia empieza a poner orden en este ‘desmadre eólico’, se empieza, como en tantas ocasiones, a intentar echar balones fuera y a salpicar, con la ponzoña en la que ellos solos se han metido, a estos y otros colectivos que exclusivamente han perseguido el cumplimiento de la Ley. Por tanto, la posición de todos los colectivos firmantes de este comunicado es tajante: los ÚNICOS CULPABLES de las posibles consecuencias que se deriven de la probable y necesaria paralización de todas las autorizaciones de proyectos eólicos en la provincia de León son, por partes iguales, LOS PROMOTORES y LA ADMINISTRACIÓN REGIONAL, debido a la chapuza mayúscula en que han convertido el desarrollo de este tipo de energía, sin entrar a discutir otros ámbitos más opacos, cuyo esclarecimiento corresponderá igualmente a la Justicia.
La necesidad por parte de los promotores eólicos de justificar ante la sociedad el incumplimiento de la legalidad por su parte, copará en próximas fechas grandes titulares con cifras económicas y de empleo con intención de manipular a la opinión pública. Para poder cotejar esos datos, no hace falta nada más que ver en que manera se han plasmado todas esas bondades de la nueva gallina de los huevos de oro para con los habitantes de los pueblos que a día de hoy ya tienen desde hace más de una década parques eólicos instalados en su terreno.
Por otra parte, las empresas industriales del negocio eólico arrastran desde hace muchos meses su crisis, con anterioridad a estas sentencias contrarias a sus parques en la provincia de León, en línea con la situación económica actual y del sector energético en particular. Los ERES que dichas empresas han presentado, hace ya varios meses, no obedecen a una falta de demanda interna, sino más bien a una desastrosa política de implantación, basada en subvenciones que alguien debería explicar, y a una falta de planificación empresarial. Para conseguir fijar el empleo del sector eólico ¿tendremos que estar eternamente instalando parque eólicos en la provincia? Es una paradoja, que mejor no intentemos resolver.

GEDEMOL
URZ
A Morteira
Ecologistas en Acción
Filón Verde
Plataforma para la Defensa de la Cordillera Cantábrica
Plataforma para la Defensa de Gistreo
Tyto Alba

0 comentarios:

Publicar un comentario

Related Posts with Thumbnails
 
Powered by Blogger